Dichoso el que un buen día sale humilde
y se va por la calle, como tantos
días más de su vida, y no lo espera
y, de pronto, ¿qué es esto?, mira a lo alto
y ve, pone el oído al mundo y oye,
anda, y siente subirle entre los pasos
el amor de la tierra, y sigue, y abre
su taller verdadero, y en sus manos
brilla limpio su oficio, y nos lo entrega
de corazón porque ama, y va al trabajo
temblando como un niño que comulga
mas sin caber en el pellejo, y cuando
se ha dado cuenta al fin de lo sencillo
que ha sido todo, ya el jornal ganado,
vuelve a su casa alegre y siente que alguien
empuña su aldabón, y no es en vano.
Alto Jornal a Conjuros. Libro segundo
Rodriguez, C. Desde mis poemas (edición del autor)
Cátedra. Madrid. 1999. Sexta Edición
¡¡Gracias Naci!!
2 comentarios:
¡Dichoso!
que gusto sentir el amor así, ganarse el jornal así, vivir así.
Maravilla
¡¡¡Esta poesía es preciosa!!! ¿verdad???
... si tuviera un sueño, un deseo profundo, o una realidad que quisiera cuidar, mimar y eternizar ... sería, sin duda, esta.
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